Los incumplimientos tienen diferentes tipos de consecuencias: financieras, crediticias y legales. Las financieras consisten en el cobro de intereses, cargos y comisiones por parte de Afluenta. Los cargos y comisiones de Afluenta tienen su origen en los costos incurridos por el débito fallido al intentar cobrar la cuota, así como por las gestiones posteriores realizadas a los fines de cobrar la misma. Los intereses punitorios en favor de los inversores se computan desde el día del incumplimiento hasta la efectivización real del pago. Por otro lado, las consecuencias crediticias abarcan la información de los incumplimientos a las centrales de créditos de mercado, lo cual impactará negativamente en tu perfil crediticio para solicitar créditos futuros a través de Afluenta o en el sistema financiero en general. Finalmente, las consecuencias legales se derivan de las acciones de cobranzas para que los que invirtieron recuperen su dinero.